Por: MS.c Angel Taboada Salmerón
El aniversario 126 de la caída en combate del Mayor General Antonio Maceo Grajales y el 88 del natalicio del líder de las luchas en la clandestinidad Frank País García, es recordado hoy en toda Cuba, con especial connotación en la indómita tierra donde nacieron, Santiago de Cuba.
El Titán de la Protesta, nos enseñó que los principios no son negociables, que no puede haber entendimiento con los que pretenden arrebatarnos la Patria, porque “la Patria ante todo” y Frank sostuvo que, “el día que quede un solo cubano que crea en esta revolución, ese cubano seré yo”
La estirpe heroica de Antonio Maceo y Frank País tuvo su continuidad en los miles de cubanos que derramaron su sangre mientras combatían por la libertad de naciones africanas, los que hace 33 años recibieron digna sepultura durante la Operación Tributo, y contarán siempre con el respeto de las presentes y futuras generaciones.
De Maceo nos dijo Fidel, “(…) Maceo tan valiente, tan puro, tan leal, tan disciplinado…” y de Frank, “Símbolo de toda la generación que se sacrificó’’ Ambos dejaron su impronta en la historia cubana, no evadieron su responsabilidad como patriotas y desafiaron la muerte en defensa de sus ideales.
La trayectoria revolucionaria de estos dos paradigmas de la tierra santiaguera, Maceo y Frank, unidos en la historia, y el calendario, nos señalan el camino en las disímiles y complejas batallas que libramos hoy por hacer perdurable la obra patriótica y humanista a la que consagraron sus vidas.
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