Acatando un dictamen de la Empresa Forestal de Santiago de Cuba, trabajadores de la Dirección de Servicios Generales de la Universidad de Oriente, con el apoyo de otros técnicos del centro, realizaron hoy la tala de un gran árbol ubicado a la derecha del acceso principal a la sede Maceo. El procedimiento exigió, dada la posición y avanzado deterioro de la planta, precisión y cuidados extremos.
Tras la operación se pudo constatar el enorme peligro que representaba la especie para transeúntes y autos que, por lo general, circulan o estacionan en la zona, que limita con la Avenida Patricio Lumumba.
Autoridades académicas de la Universidad lamentan que esta necesaria y urgente labor haya herido, como se pudo verificar, el sentimiento de numerosas personas. Se les recuerda a profesores, trabajadores y estudiantes que acciones como estas pretenden proteger su integridad física.
Fotogalería
Fotografías de Eduardo Pinto Sánchez
En el corazón de la planta, una pasta de materia vegetal poco compacta había sustituido a la madera y dejado ahuecado y sin fuerzas el tronco y las raíces más vigorosas del árbol
Imagen de la base del tronco. Obsérvese el profundo agujero en el centro
Imagen de la entrada de la sede Antonio Maceo de la Universidad de Oriente. Nótese la ausencia del árbol, al fondo del asta, al contrastarla con una fotografía anterior
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Fui uno de los que pensó “¿Por qué hicieron eso?” en un tono de crítica, y ahora comprendo lo sucedido. Pues si era lo mejor para todos, entonces fue una buena decisión.
Me resultó muy triste pasar la semana anterior por el frente de la Universidad de Oriente y ver como la habían despojado de uno de sus más hermosos árboles. Estudié en este centro entre el 2006 y el 2007, y desde entonces he continuado como profesor adjunto. Durante tantos años han sido decenas los árboles que he visto talar sin justificación alguna, tanto en la residencia estudiantil Antonio Maceo como en las áreas docentes-administrativas. Parece una campaña para convertir este centro en un lugar despoblado de árboles, si bien los jardines se han embellecido mucho. En esta nota hay muchas cosas que no se entienden, la primera de ellas es que no solo talaron el gigantesco algarrobo sino también un roble blanco que estaba cercano. En las fotos es apreciable un orificio en el tronco del árbol, en el que se ven vestigios también de que intentaron quemarlo!!! Es normal en decenas de especies vegetales, en especial las que se usan en jardinería, que cuando las plantas son muy viejas muera todo o parte de la médula del tronco, lo cual no significa que esté muriendo, ni enfermo, ni que constituya un peligro. Que otra evidencia se necesita para avalar la salud de este, que el hecho de resistir inmaculado el paso del Huracán Sandy por esta ciudad. Estimados directivos de la Universidad de Oriente: cientos son los estudiantes de las ciencias naturales que se han formado en sus aulas, en especial biólogos, mucho de ellos botánicos de renombre nacional e internacional, con magníficos aportes a la ciencia cubana. Es vergonzosa una nota en la que evidentemente no concuerdan las justificaciones con la realidad. En la presente semana la Universidad fue visitada por el Profesor Alejandro Palmarola, presidente de la Sociedad Cubana de Botánica, de la cual también soy miembro, para intercambiar con estudiantes sobre el proyecto Planta, dirigido al rescate y conocimiento de la flora cubana. Es una pena que una institución que participe de este proyecto acometa tal tala de árboles. Por favor, ya el daño está hecho pero bien que en vez de gastar cientos de miles de pesos en jardines podrían comprar árboles adecuados para sembrar en las áreas despobladas de la Universidad. Y por último, si cuentan con un Departamento de Biología con numerosos especialistas en Botánica, asesórense bien con ellos, a las empresas forestales les interesa más cortar madera que sembrar árboles, y eso no es secreto para nadie. Saludos cordiales, MSc. Yander Diez…