La Universidad de Oriente contribuye, de manera constante, al desarrollo del país. Hay que considerar que, al finalizar cada curso, egresan profesionales de los diferentes procesos de formación con una buena preparación.
Debido al impacto de la COVID-19 en nuestro país los cursos de posgrados, maestrías, doctorados y diplomados, han reajustado sus programas con el fin de garantizar la salud de los aspirantes.
No obstante, la Dra.C. Rosa María Reyes Bravo, Vicerrectora de Investigación y Posgrado de la Casa de Altos Estudios Oriental, dijo que después de recibirse la Resolución 51 del 2020 del Ministro de Educación Superior, estamos en una etapa de revisión y ajustes del crédito de cada programa; en correspondencia con lo planteado en el reglamento de posgrado que es la Resolución 140 del 2019.
“Esto tiene que ver con un ajuste de horas por créditos, antes un crédito tenía una cantidad de horas y eso ya disminuye. Las maestrías y posgrados que duraban 2 años y medio, ahora pueden ser de 1 año”, aclaró Reyes Bravo.
Más adelante comentó que esos procesos se ajustarán a la modalidad a distancia, por la situación difícil que vive nuestro país; todo lo cual conlleva a la modificación de la actividad de posgrado.
“Ya se le ha orientado a los coordinadores de las 30 maestrías y 7 especialidades de la Universidad de Oriente hacer, en este periodo de septiembre y octubre, ajustes a esos créditos de los programas que habían comenzado y tuvieron que interrumpirse. Se debe realizar una adecuación de los cursos y sus contenidos” comentó la Vicerrectora de Investigación y Posgrado de la Casa de Altos Estudios Oriental.
Los cambios al respecto deben ser aprobados por la Rectora de la Universidad de Oriente, la Dra.C Diana Sedal Llanes. Y es que hay que considerar que, a los efectos de un proceso de evaluación externa en el futuro, lo pactado queda como constancia, debidamente autorizada, de los ajustes realizados.
La Dra.C. Rosa María Reyes Bravo, Vicerrectora de Investigación y Posgrado de la Casa de Altos Estudios Oriental explicó la necesidad de hacer ajustes en las formas en que se concluyen un programa de posgrado; antes se habla de una tesis y ahora se habla solo de un concepto de memoria escrita con diferentes variantes.
Reyes Bravo enfatizó que esta memoria escrita no debe ser obligatoriamente de una investigación, puede ser de un ejercicio teórico, y los comités académicos están evaluando esta situación.
Luego de que la Rectora de la UO apruebe los ajustes a los cursos de posgrados, estos programas pueden reanudarse a partir de noviembre si las condiciones higiénico-sanitarias lo permiten.
Cuando sea posible se le informará a la población aquellos programas que fueron aprobados para nuevas ediciones con una previa convocatoria y donde las personas hicieron sus matrículas el momento en que se reanudarán las clases presenciales.
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