Por: Karla Camila Del Río
Pudiera ser que la asignatura de Filosofía, imprescindible en todos los planes de estudio en la Educación Superior, se hiciera tediosa para los estudiantes. Quizás sea el enfoque que se le dé en las clases; o la falta de interés de los educandos. Lo cierto es que es muy común encontrar cierto desagrado entre los jóvenes universitarios de diversas carreras si del tema Filosofía se trata. Están, evidentemente, faltos de motivaciones.
Si bien, los conceptos y corrientes filosóficas pueden tornarse difíciles de comprender, desde la perspectiva académica que se ofrece en las aulas, la filosofía va más allá de los conceptos ofrecidos en libros; es el estudio una variedad de problemas fundamentales acerca de cuestiones como la existencia, el conocimiento, la verdad, la moral, la belleza, la mente y el lenguaje, o lo que es lo mismo, es la búsqueda del sentido del todo en conjunto, de la existencia humana.
Es preciso entonces cultivar el interés por la filosofía en los futuros profesionales de nuestro país; se necesitan métodos más didácticos y amenos.
El mundo de Sofía, es libro perfecto para enamorarse de la Filosofía. Escrito en 1991 por el noruego Jostein Gaarder, logra unir la narrativa de una novela de misterio con textos sobre la historia del pensamiento filosófico humano.
Cuenta el libro que una adolescente noruega de 14 años llamada Sofía, a poco más de un mes de cumplir 15, recibe una misteriosa carta que solo contenía una pregunta ¿Quién eres? A partir de entonces la joven se embarca en un viaje a través de la historia de la mano de un misterioso profesor; que comienza a enviarle a la protagonista una suerte de curso por correspondencia de Filosofía.
A medida que la trama avanza y a la vez que conocemos quien es el profesor, el lector se adentra en la historia de la Filosofía; desde su surgimiento en la antigua Grecia, pasando por Platón, Aristóteles, la Edad Media y El Renacimiento, hasta filósofos más contemporáneos como Nietzsche, Jean Paul Sartre y Albert Camus y así de una forma didáctica, reconstruye el pensamiento filosófico occidental.
Gaarder –quien, en su obra, orientada principalmente a los jóvenes y niños, trata de resolver problemas filosóficos a través de la ficción- nos regala en este libro, la oportunidad de mirar con otros ojos la Filosofía. Nos permite descubrir nuestra identidad y la capacidad humana para hacer preguntas, a la vez que conjuga el rigor y la amenidad en una narrativa agradable para todo tipo de público.
Bajo la premisa de que ²lo único que necesitamos para convertirnos en buenos filósofos es la capacidad de asombro² El Mundo de Sofía nos ofrece una Filosofía cercana, más allá de conceptos estrictos y esotéricos. Una Filosofía al alcance de quien entienda que no hay nada por sentado y se dé la oportunidad de maravillarse de lo raro y hermoso de la existencia humana.
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