El actual escenario que impone la presencia de la Covid-19 en el mundo, y de manera particular en nuestro país, condujo a que la suspensión de las clases fuese una necesidad. Si recordamos, entre finales de septiembre de 2019 e inicios de octubre del mismo año, nuestra casa de altos estudios vivió una condición similar: se suspendieron las actividades docentes, en esta ocasión por la situación energética que vivía el país. Valorando ambos hechos podemos percatarnos que tenemos de algún modo la experiencia y la vivencia de continuar asumiendo nuestras tareas y funciones fuera de los predios universitarios.
El actual escenario que impone la presencia de la Covid-19 en el mundo, y de manera particular en nuestro país, condujo a que la suspensión de las clases fuese una necesidad. Si recordamos, entre finales de septiembre de 2019 e inicios de octubre del mismo año, nuestra casa de altos estudios vivió una condición similar: se suspendieron las actividades docentes, en esta ocasión por la situación energética que vivía el país. Valorando ambos hechos podemos percatarnos que tenemos de algún modo la experiencia y la vivencia de continuar asumiendo nuestras tareas y funciones fuera de los predios universitarios.
Para contribuir a tu preparación desde casa, quiero poner a tu alcance algunas ideas que aparecen recogidas en la colección del Grupo Océano “Máster Biblioteca Práctica de Comunicación”.
Es importante comenzar explicando que un elemento esencial para el aprendizaje efectivo y de calidad es conocer a fondo la preferencia en la manera de aprender de cada cual; la forma en que se absorbe y retiene la información. Dependiendo del estilo que se tenga, cada persona recogerá, organizará y transformará la información de forma distinta. Por ello es muy importante identificar y examinar el estilo de aprendizaje.
Se puede hacer referencia a 4 tipos de estilos de aprendizaje: activista, reflexivo, teórico y pragmático. Veamos a continuación qué caracteriza cada uno y qué aspectos y/o situaciones pueden favorecer o entorpecer el aprendizaje, de acuerdo con el estilo que se posea.
Activista
El activista prefiere participar en situaciones de aprendizaje que le den la oportunidad de estar activo, que incluyan nuevas experiencias y problemas; donde disponga de libertad. Le gusta tomar parte en nuevas experiencias de aprendizaje, posee una mente abierta, está todo el día activo, se crece ante los desafíos y, apenas acaba una actividad, ya está iniciando otra. Le gusta ayudar a los demás.
La persona con este con este estilo poseerá algunas de las siguientes características en mayor o menor medida: improvisador, arriesgado, espontáneo, animador, aventurero, inventor, vital, lanzado, protagonista, conversador, líder, divertido, participativo, creativo, innovador, competitivo, etc.
El activista aprende mejor cuando asume algún riesgo o acapara la atención, por ejemplo. Sin embargo, el aprendizaje le resulta más difícil si trabaja en solitario o debe repetir la misma actividad.
Reflexivo
El reflexivo se siente mejor en aquellas actividades de aprendizaje estructuradas, donde tiene tiempo para observar, reflexionar y pensar, así como para trabajar minuciosamente. Le gusta mirar una misma cosa desde perspectivas distintas, recoger muchos datos y analizarlos para luego llegar a una conclusión. Es prudente y suele observar a los demás y escucharlos sin intervenir hasta que domine la situación. Parece distante y condescendiente.
Estas personas poseen algunas de las siguientes características: analítico, receptivo, concienzudo, exhaustivo, observador, paciente, detallista, cuidadoso, estudioso, elaborador de argumentos, prudente, lento, investigador, etc.
Aprende mejor cuando tiene que observar, trabaja sin presión, investiga y analiza detalladamente lo que aprende. En cambio, se le dificulta el proceso cuando es centro de atención, trabaja bajo presión, asume el liderazgo y debe cambiar de actividad de forma apresurada.
Teórico
El teórico disfruta en situaciones de aprendizaje donde los objetivos están claros, todo está muy estructurado y se sigue un proceso lógico. Es metódico en el trabajo, le gusta preguntar y ser perfeccionista. Prefiere pasar de los hechos a las teorías ya que le gusta analizar y sintetizar. Es racional y objetivo.
La persona que posee este estilo tiene las características que a continuación se relacionan: lógico, crítico, estructurado, metódico, objetivo, razonador, sistemático, planificador, disciplinado, generalizador, sintético, ordenador, elaborador de teorías, modelos y conceptos.
Suele aprender mejor si la información está muy estructurada, dispone de todos los datos necesarios y las situaciones son complejas. Si actúa sin un objetivo claro, hace algo bajo presión emocional, no cuenta con un plan metódico o considera trivial el tema, se le dificulta el aprendizaje.
Pragmático
El pragmático responde más positivamente a los aprendizajes prácticos. Le gusta aplicar las ideas a la práctica. Es de actuación rápida por lo que se impacienta cuando alguien empieza a teorizar. Cree que las cosas siempre se pueden hacer mejor y se muestra seguro ante los proyectos atractivos. Su lema es “si funciona es bueno”.
Sus características son: práctico, eficaz, realista, experimentador, útil, decidido, rápido, técnico, positivo, concreto, objetivo, claro, seguro de sí mismo, planificador, aplicador de lo aprendido, etc.
Su aprendizaje es efectivo cuando aplica la práctica, existen planes de acción, experimenta y puede hacer las cosas por sí mismo; sucede lo contrario si se percata de que el aprendizaje no se relaciona con una necesidad inmediata o se da cuenta de que lo que hace está muy lejos de la realidad.
Debemos considerar, también, que todas las personas no tenemos la misma curva de trabajo, hay personas que comienzan con una capacidad de trabajo baja y a medida que transcurre el tiempo van aumentando esta capacidad, logrando su mayor efectividad en la parte media del período de tiempo, luego comienza a descender. Existen otras personas que comienzan con una capacidad de trabajo baja y comienzan a ascender hasta lograr su máxima capacidad al final del intervalo de tiempo y, por último, existen otras que comienzan con la capacidad alta y durante el período de tiempo van en descenso hasta el final.
¿Cuál es tu curva de trabajo? ¿Cuál de las representaciones se acerca más a tu rendimiento durante un día de estudio? ¿Qué utilidad tiene conocer mi curva de trabajo o rendimiento? Cada modelo de curva de trabajo intelectual se puede adaptar al grado de dificultad de las asignaturas.
Si tu curva de trabajo es la primera que mencionamos, debes comenzar el estudio con las materias de dificultad media para ti, luego las de mayor dificultad y, para el final reservas las que te son fáciles. En cambio, si te corresponde la curva ascendente, es decir, comienzas con una capacidad baja y vas alcanzando, en el tiempo, la máxima, te recomendamos comenzar con las materias que te son fáciles y luego abordar las más complejas. Por último, estarían quienes poseen una curva descendente, si estás en ese caso comienzas con las más difíciles y terminas con las que te resultan más fáciles.
No tiene que ser siempre la misma curva de aprendizaje para una misma persona, sino que puede alternarse en diferentes momentos, en dependencia del estado anímico, de salud, la complejidad de las actividades a enfrentar, el tiempo del que se dispone y las condiciones objetivas (luz, calor, horario, etc.).
Ahora verás que los contenidos que ya recibiste te ayudan a comprender mejor los contenidos actuales; las habilidades que empezaste a desarrollar en otras asignaturas ahora se perfeccionan y te hacen más fácil asumir las actividades presentes; en la medida que lees, buscas información y respondes tareas, vas desarrollando valores a nivel personal y profesional.
¿Clasifica las tareas que tienes por delante…cómo?, sencillo: en urgentes o importantes. Por supuesto que las urgentes requieren una atención inmediata, las importantes, en cambio, hay que asumirlas antes de que se vuelvan urgentes. Este también es un ejercicio que puede ayudarte a reorganizar tus actividades docentes, pero desde casa.
Ya te analizaste? …Cuál es tu estilo de aprendizaje? Conócete mejor para que tú tiempo de estudio sea más efectivo.
Y recuerda: #QuédateEnCasa, colabora en las tareas que estén a tu alcance en tu entorno y apoya en el cumplimiento de las medidas orientadas por el país.
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