Al latido de su tiempo

Por: Dra.C. Olga Portuondo Zúñiga

El embrión de la Universidad oriental se gestó desde los finales del siglo XVII cuando la aristocracia criolla de la tierra demandaba a la Corona española y a la Santa Sede un centro de enseñanza superior para que su juventud de esta región de la isla de Cuba acudiera a sus aulas y les sirviera de provecho en sus planes de progreso.

Constituido finalmente en 1722 el Seminario de San Basilio el Magno este marchó al ritmo del fomento de la Ilustración. De sus aulas salieron jóvenes que, en el transcurrir del tiempo, fueron portadores de una cultura propia y se educaron para la forja de la nación cubana ya en el siglo XIX.

Los esfuerzos por fundar una universidad en Oriente surgieron desde los mismos comienzos de la República. Fue el pueblo santiaguero, unido en reclamo provechoso, quien alcanzó el anhelado designio en 1947. Era una conquista postbélica que aseguraba el desarrollo de la región para beneficio de “las clases vivas”.

El triunfo de la Revolución aseguró para el país la transformación radical de la sociedad. El Alto Centro de Estudio en Oriente recibiría el beneficio de la Reforma Universitaria de 1962. Nuevas y contemporáneas carreras vieron la luz y la matrícula se amplió a todas las provincias, gracias al sistema de becas. En los edificios y caminos del recinto se respiraba el ambiente de los cambios. Y aquellos primeros graduados ocuparon lugar singular de respaldo a las transformaciones requeridas por su época.

Las generaciones que ocupen el tiempo del segundo milenio necesitan de una Universidad que asegure el papel que habrán de desempeñar en la realización de los sueños de perfeccionamiento de su realidad. Será preciso la atención de las autoridades al conciliar unos planes de estudio y carreras que garanticen el quehacer futuro adecuado y útil a su país. “Ciencia y Conciencia”, claro está: el hombre que ame a su terruño –lo que le permitirá explicarse a sí mismo—, que piense y cultive ideas propias para ponerlas al servicio del crecimiento ascendente de esta parte del mundo, que es el suyo.

¡Felicidades en un 75 Aniversario colmado de prácticas y proyectos por nuestra sociedad!

Visitas: 0

Like

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.