Estimados y estimadas, miembros de la comunidad universitaria:
[…] “de los hombres y de sus pasiones, de los hombres y de sus virtudes, de los hombres y de sus intereses se hacen los pueblos”. Así expresó José Martí, nuestro Héroe Nacional; así también surgió esta universidad hace 67 años, de los deseos de un pueblo. Nació con el mismo espíritu de la Revolución: digna, humana, llena de sueños por la Educación.
El 3 de enero de 1959 acogió la fundación, en su Biblioteca, del primer Gobierno revolucionario. Unas semanas después, su comunidad rendía tributo al capitán Eduardo Mesa Llul, quien cursaba estudios de Leyes en la Casa de Altos Estudios oriental antes de incorporarse al Ejército Rebelde.
Son acontecimientos que nos llegan a la memoria cada enero, hechos que han dado un sello especial a la Universidad de Oriente. Con semejante compromiso hemos labrado nuestra vida, cargada de retos, conquistas y tareas inconclusas. Llevamos años recorriendo el camino hacia la excelencia en nuestro claustro, en cada una de nuestras carreras y proyectos. Es un camino de aspiraciones como profesionales de la Educación. Estamos llenos de optimismo y somos fieles a la historia.
Hoy compartimos, además, con alegría, la existencia en un universo complejo, pero también más unido e interconectado. Este será un año de grandes metas para nuestro centro, que se prepara para acreditar todos sus programas de pre y postgrado, incrementar el número de doctores en ciencias, lograr nuevos proyectos empresariales, consolidar un gran evento científico y continuar el mantenimiento constructivo de los espacios universitarios.
Se iniciará una nueva etapa, de integración con la Facultad de Cultura Física y la Universidad de Ciencias Pedagógicas. Unidos crearemos una Universidad de Oriente más amplia, más diversa, más pertinente. Será un año, por tanto, de ideas comunes; de empeños mayores. Pero acercar los resultados académicos a la solución de los problemas de la sociedad seguirá siendo la tarea principal que acogeremos, desde un enfoque económico, con dinamismo y eficiencia. Debemos aportar todo el saber que preservamos y desarrollamos desde cada una de las ciencias, y esta debe ser la razón de futuros cambios en los planes de estudio, para acercarlos cada vez más a las necesidades del territorio y el país.
Los que hemos escogido la Universidad como proyecto para la vida tenemos un deber: demostrar calidad en todas nuestras acciones. Esto significa haber bien nuestro trabajo: ese es nuestro deber, y la felicidad nos surge al colocar el corazón en el trabajo, con alegría y entusiasmo.
La Universidad de Oriente, sus espacios y edificios, constituyen una parte de nuestro hogar y; como lo hacemos con él, debemos convertir a la UO en una casa agradable, donde impere el respeto, la disciplina, la limpieza. Cuidemos su aroma, cultivemos la dignidad todos los días. Hagamos crecer este sueño del pueblo.
“Son los tiempos como ondas del aire, que entre sí se comunican y extienden las glorias de los que se cobijaron a su sombra”, apuntaba también Martí. Hagamos todos, de estos tiempos, los mejores y más firmes para nuestros principios y valores. Eso nos llenará de satisfacción.
Para el Consejo de Dirección, el Buró Universitario Sindical, el Consejo de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) y los comités de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) y el Partido Comunista de Cuba (PCC) en el centro, es un orgullo compartir tanta historia y grandeza con una comunidad digna, que nos inspira cada día para seguir haciendo, juntos, la obra mayor.
En este año, 2015, en el que la Ciudad Héroe de la República de Cuba cumplirá medio milenio, seguiremos consolidándonos como centro universitario de excelencia.
¡Feliz aniversario del triunfo de la Revolución!
¡Feliz 2015!
Dra.C. Martha del Carmen Mesa Valenciano
Rectora de la Universidad de Oriente
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Después de tan sugerente título, hermosas palabras y haber debatido los resultados que nuestra Universidad ha obtenido desde la Ciencia y el Posgrado, solo nos queda el compromiso del trabajo incondicional por alcanzar las metas siempre superiores que nuestra “ALTA CASA DE ESTUDIOS” se impone y que constituye un reto para toda la comunidad universitaria.
Como reza un viejo refrán: “que lo sepan los nacidos y los que están por nacer, nacimos para vencer y no para ser vencidos”. Así en este año debemos demostrar con resultados que estamos en disposición de seguir batallando e impulsando todos los proyectos de esa hermsa obra iniciada décadas atrás, para que la Universidad de Oriente sea expresión digna de Ciencia y Conciencia, para que en su derrotero renazca fortalecida con la integración de estructuras, inteligencias y experiencias acumuladas.