Por : Marinelis Lora Castro
Hasta el momento de redactar esta crónica, en Cuba se reportan más de 200 casos positivos al Covid-19. Para muchos no es una cifra significativa, pero, para quien le tocó vivir una experiencia cercana con el particular, sabe que puede ser el fin de una vida. Mientras trabajo desde mi casa no puedo dejar de escuchar a personas indolentes, como los muchachos que se paran en la esquina, que dicen: “solo hay 6 muertos, eso no es nada, peor está en Europa, solo cuando 200 o 300 se mueran me quedaré en mi casa”.
Al escuchar comentarios tan desatinados me asusta pensar que no les duela la muerte de seis seres humanos; me asusta pensar que no están tomando todas las medidas “porque son jóvenes y a ellos no les va a pasar nada”. Es válido decirles a los jóvenes que, aunque las estadísticas digan que no les va a pasar nada, piensen en sus padres, sus abuelos, en los vecinos, en sus compañeros de trabajo y en un país que busca ayudar a todos.
Cuba, de manera preventiva, ha tomado todas las medidas necesarias; acordes con el difícil momento que nos ha tocado vivir. Los médicos cubanos, enfermeras, técnicos y personal de la salud en su totalidad luchan, en jornadas inapreciables, por mantener la vida de los que hoy están enfermos. A diferencia de otros países, la asistencia médica en Cuba es gratis, garantía de que cada persona que se contagie será atendida, no importa el nivel de sus ingresos. La seguridad de esa atención nos mantiene muy confiados.
Sin embargo, el aumento de los casos en Cuba, no está en las manos de los médicos cubanos; la prevención depende de nuestras actitudes. Es de vital importancia tomar todas las precauciones: lavarse las manos varias veces en el día, limpiar la casa con desinfectantes, salir de casa solo a cumplir con funciones vitales y tener en cuenta que al regresar a tu hogar debes lavar la ropa que usaste.
La disciplina y la responsabilidad son dos aliados que nos pueden ayudar a ganar esta guerra. Me gusta mucho la frase que dice que: guerra avisada no mata… más que nunca debemos estar informados del acontecer nacional, a través de los medios de comunicación cubanos.
¿Estás en casa? aprovecha y perfecciona tu tesis, mantente en contacto con tus tutores o repasa esa asignatura que te da dolor de cabeza y supera la dificultad. No es tiempo de visitas, ni de fiestas, todo tiene su tiempo y este es uno diferente pero que tú le puedes dar sentido, siendo consciente de que si te quedas en casa salvas muchas vidas. Es tiempo de prevenir, porque eso vale más que lamentar.
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Solo la actuación ciudadana responsable permitirá vencer desde la prevención esta terrible pandemia.