Por: Anita Lora y Lia Maria Casan
La Universidad de Oriente guarda mucha historia en 73 años de fundada. Grandes personalidades han salido de sus aulas. Entre ellas se cuenta la heroína de la República de Cuba, Vilma Espín Guillois, quien ingresó a la Alma Mater Oriental un 25 de septiembre de 1948, en la carrera de Ingeniería Química Industrial.
A la valiente mujer, de sonrisa siempre amplia, la podíamos encontrar lo mismo portando el banderín de su escuela de ingeniería en los juegos mambises, o la bandera cubana con su equipo de voleibol; en la Coral Universitaria o en el grupo de danza de estudiantes aficionados.
Su sencillez, inteligencia, sensibilidad humana y desinterés, la convirtieron en líder de las actividades revolucionarias y, de igual manera, de la Federación de Estudiantes Universitarios. Durante los 6 años que estuvo en la institución, Vilma, afianzó y desarrolló sus ideas políticas; dejó huellas imborrables en sus compañeros y profesores. La Universidad de Oriente fue el lugar adonde Vilma se convirtió en revolucionaria. Durante su paso por la Universidad promovió la propaganda clandestina y fue parte del Golpe de estado a Batista el 10 de marzo de 1952.
En 1954, al culminar sus estudios, se convierte en una de las dos primeras mujeres en alcanzar el título universitario de Ingeniería Química. En la etapa de la Revolución en el poder visitó varias veces la Universidad de Oriente: aquí reconoció la tradición de lucha de la comunidad universitaria, así como su papel formador de ciencia y conciencia.
La Universidad de Oriente le otorgó el título de “Doctor Honoris Causa” en el año 2000, como muestra de los sentimientos de todo el pueblo hacia la inmortal heroína.
Quienes tuvieron el placer de conocerla sabían de su perseverancia y lucha por construir una mejor nación; donde las mujeres fuesen respetadas y también contasen con una organización propia. Vilma es, y será por siempre, ejemplo de que estudiar y luchar por la Patria sí es posible.
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