Por Dra. C Diana Sedal Yanes. Rectora de la UO (Tomado de su perfil en Facebook)
He seguido con agrado y satisfacción el intercambio que se ha suscitado en las redes sociales, la reflexión de la Viceministra Primera del Ministerio de Educación Superior, Dra. C. Martha del Carmen Mesa Valenciano, en días pasados sobre su concepción sobre ser Profesor universitario.
Diversidad y complejidad sugieren los comentarios, todos en correspondencia con los tiempos que vivimos y la necesidad del debate ideológico, que sin dudas están pendientes en algunos espacios y que definitivamente debemos ponerlos sobre la mesa, porque al parecer, sí, algunos han olvidado que es ser un Profesor universitario.
Aprovecharé para ofrecer mi criterio como profesora, pero quedará pendiente para los próximos días la reflexión colectiva del claustro universitario en torno al tema, pues estoy convencida que será enriquecido por todas y todos los profesores de la septuagenaria Universidad de Oriente que han formado múltiples generaciones de estudiantes con vocación de evangelio y alma de educadores.
De manera que si tuviera que expresar lo que debe ser un profesor universitario en CUBA diría.
Ser un profesional políticamente comprometido con la ideología de la Revolución cubana, educador por naturaleza, con profunda sensibilidad humana y coherencia entre su actuar y pensar.
Es decisión de vida, servir a la Patria en la formación de estudiantes universitarios aptos para contribuir a la construcción de una sociedad que fijó el Socialismo como aspiración e ideal y eso presupone continuar desarrollando el potencial pedagógico, científico, técnico e innovador, sobre bases sostenible para las presentes y futuras generaciones.
Por último, siempre será un reto porque en Cuba las universidades son generadoras de ciencia y conciencia, revitalizadoras de la historia e identidad y propulsoras del progreso y el compromiso social. De ahí que en el Alma mater oriental, ser Profesor universitario es motivo de orgullo, honor y responsabilidad.
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