El primer lunes de octubre de cada año se celebra el Día Mundial del Hábitat, instituido por la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas. Fue instaurado en el año 1986 debido a su importancia, al crecimiento de la población y las condiciones del medio.
El hábitat o habitad es el lugar donde un organismo halla lo que necesita para sobrevivir: alimento, protección, medios. La mitad de la población del mundo vive en ciudades, por lo que se han convertido en el hábitat más importante para los seres humanos.
Cada Día Mundial del Hábitat se selecciona un lema distinto como guía de planificación. Este año, las Naciones Unidas han escogido el tema «Movilidad Urbana» dado que el acceso a bienes y servicios son esenciales para la expansión y el eficiente funcionamiento de nuestras ciudades y pueblos.
La movilidad urbana constituye una necesidad de todos. En las ciudades se trabaja por tener, en el futuro no lejano, modelos de transporte sostenibles que atraen a más y más personas a usar los trenes, autobuses, bicicletas y aceras en lugar de los automóviles altamente contaminantes.
La sede del Día Mundial del Hábitat en el 2013 es la ciudad de Medellín, en Colombia. Pero cada uno de nosotros, como parte del entorno citadino en que vivimos, también puede celebrarlo. Recordemos que la movilidad es algo más que el modo de transporte que empleamos. La planificación y el diseño urbanos deben centrarse más en cómo propiciar que las personas y los lugares se acerquen y que, en los medios de transporte, las personas se comporten observando a conductas propias de la buena educación.
Las indisciplinas sociales que hoy debemos combatir se hacen, a veces, evidentes, en los medios de transporte. Cuidemos el comportamiento adecuado a cada ocasión y así también haremos más feliz nuestro camino a diario a la Universidad y sus formas de acceder al conocimiento.
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